Una de las herramientas más comunes en el tratamiento de ortodoncia son los separadores interproximales, ya que se requiere mayormente en molares. La separación de los puntos de contacto entre dientes es crucial en el protocolo de tratamiento de ortodoncia con aparatos fijos.
Si tuviste ortodoncia hace algunos años, seguramente recordarás la sensación de tenerlos. En este artículo recordaremos qué son, para qué sirven y los distintos materiales que existen y su alcance en ortodoncia, para que así sepas elegir el que mejor convenga a tus objetivos de tratamiento. Esto definitivamente te hará entender mejor a tu paciente.
Los separadores sirven para crear un espacio entre los dientes, de forma paulatina crean un espacio suficiente y así permiten la fácil y precisa colocación de las bandas de ortodoncia, generalmente en la región de los molares. Sirven también para protocolos de enderezamiento en molares permanentes parcialmente erupcionados.
La separación insuficiente provoca el asentamiento incorrecto de las bandas o el atraso de movimientos en el tratamiento, ya que los separadores en ortodoncia también sirven para facilitar los movimientos durante el tratamiento.
Bajo el principio físico de la impenetrabilidad (que se define como la resistencia que opone un cuerpo a otro que ocupa su lugar en el espacio), ningún cuerpo puede ocupar al mismo tiempo el lugar del otro. Las gomas, al ser colocadas, ocupan un espacio entre los dientes y al retirarlas se obtiene un espacio que puede variar según el material que se utilice.
Hay varios tipos de separadores que se utilizan en ortodoncia:
Durante los últimos años los resortes y los elastómeros se han utilizado con mayor frecuencia. Antes de los separadores elastoméricos, se creaba un espacio para la colocación de la banda con un alambre de latón de 0,05 a 0,06 mm que rodeaba firmemente el punto de contacto durante 5 a 7 días.
Esta técnica era traumática y el paciente a menudo refería molestias, dolor e incapacidad para masticar en las zonas afectadas. Se considera que el separador ideal debe ser fácil de insertar, causar mínimas molestias y separar los dientes adecuadamente, no debe perderse al masticar alimentos y debe permanecer entre los dientes hasta que el ortodoncista lo retire.
Los separadores se usan comúnmente durante uno o dos días antes de la colocación de los brackets, para que los dientes tengan suficiente espacio para acomodarlos.
Los separadores pueden causar cierta incomodidad y sensibilidad dental durante su uso, pero esto suele desaparecer poco después de que se quitan. Es importante seguir las instrucciones del ortodoncista para cuidar adecuadamente los separadores y asegurarse de que estén en su lugar antes de la colocación de los brackets.
La colocación de los separadores es un procedimiento sencillo e indoloro. El ortodoncista puede utilizar un instrumento especial para colocarlos y mantenerlos en su lugar, suele durar unos pocos minutos y no requiere anestesia. Otra forma práctica, es el apoyo con hilo interdental para colocarlos de manera efectiva y práctica.
Es importante cuidar bien de los separadores para asegurar que cumplan su función correctamente y evitar complicaciones en el tratamiento de ortodoncia. Algunos cuidados importantes incluyen:
La separación insuficiente provoca dolor e incomodidad al paciente durante la colocación, además de causar un asentamiento inadecuado de los aparatos fijos. El ortodoncista puede elegir el material según lo que quiera lograr; pero es importante que el paciente siga los cuidados para lograr el objetivo del separador en la boca y no se pierda el espacio ganado o haya un atraso en el tratamiento.
Manjunath et al., en la página National Library of Medicine, confirmaron que los separadores elastoméricos producen una buena cantidad de separación después del día 1 y son los más confiables con alrededor de solo el 2% de pérdida. El nivel de incomodidad con estos separadores es menor comparados con los separadores de otro tipo. El único problema encontrado con los separadores elastoméricos fue que estos separadores tienden a cortarse durante la masticación del alimento.
Los separadores elastoméricos son los más utilizados. Sin embargo, a la velocidad de los avances, es probable que sigamos encontrando nuevas alternativas que faciliten el uso, la aplicación y sobre todo el objetivo.
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